Miriam recuerda que, cuando tenía 24 años, siempre decía lo lindo que sería hacer una carrera de mujeres ya que “nosotras, al igual que los hombres, podemos”.
Y más todavía, podíamos enseñarles el orden; ya que antes en las carreras callejeras o en el autódromo, se corría así nomás; después comenzaron a largarse por categoría.
En un viaje a Punta María, junto a su mamá y su hermana Sonia, les dijo: «Tengo ganas de hacer una carrera de mujeres, pero pura y exclusivamente de corredoras mujeres, con banderilleras, cronometristas, mecánicas, comisión, etc.»
En ese momento su mamá y hermana le dijeron que estaba loca…»Vos siempre con esas extravagancias».
Ella ya tenía la película en su cabeza y pensando en que esta mujer, o aquella otra podrían correr, y cómo debería ir organizándose todo lo necesario para hacer esta competencia.
Así fue como una tarde en que Elena de Mingorance fue a la casa de la familia Álamos por unos papeles del padre, le comentó que tenía ganas de hacer una carrera de mujeres, pero pura y exclusivamente de mujeres, corredoras, banderilleras, cronometristas; y que ya tenía más o menos las damas que podían correr. Que obviamente había que hablar con los maridos para que les prestaran los autos.
No terminó de comentarle a Elena que ésta se entusiasmó enseguida, dejó a un lado las carpetas con que estaba trabajando y rápidamente le preguntó qué tenía más o menos pensado. Ante lo cual Miryam trajo unos papeles donde tenía la lista de quiénes podrían participar.
Elena dijo que tenían que hacerla y había que buscar gente que pudiera colaborar con la idea. Así fueron sumando a Sonia (su hermana), Victoria Mallemaci de Nogar, Nélida Juich de Magaldi y Edith S. de Gallardo.
En ese entonces el intendente era el Sr. Néstor Nogar, quien ya había apoyado una carrera de mujeres en circuito callejero, es por eso que cuando se le comentó sobre la idea de Miryam, aceptó muy bien la propuesta.
Fue así que se formó la Comisión de Mujeres Fueguinas, organizando en unos 40 días la primera carrera, que se llevaría a cabo el 15 de abril de 1973.
Conseguir los autos
Fue hablando primero con las mujeres para ver si querían participar, y más tarde con los maridos para que les prestaran el auto. En aquel entonces, los autos eran de los maridos y era raro que las esposas tuvieran uno propio.
Si lo tenía era porque su marido se lo había regalado, pero no era algo común, había tres nomás en el pueblo.
La mayoría decía que su esposo no iba a querer ya que querían y cuidaban mucho su auto.
Cuando iba a hablar con los maridos, le comentaba que iba a hacer una carrera sólo de mujeres, que no iba a ser de velocidad, era “sólo para dar una vuelta”.
Y también, previendo que algo pudiera pasarle al vehículo, su cuñado René Díaz se hacía responsable de arreglar el auto, sin cobrar un peso. Por más que tuviera la culpa la mujer o no.
Organización
Fuimos a las escuelas para ver lo de las banderilleras con las alumnas. Para poder diferenciarlas fuimos a hablar con los clubes, quienes tenían los equipos de gimnasia. QRU fue quien los prestó.
El día que fue al Gimnasio a hablar para que les presten los equipos, justo entraban hombres de la Comisión de Carreras de varones, entre ellos Donoso y venían riéndose, y le dicen… “cómo va todo, ¿cómo va esa organización?”; a lo cual respondió… “hasta aquí creo que bien, nos conformamos con dar unas vueltitas y listo”. Y ellos acotaron… “hagan lo que puedan, que recién van a empezar”… y cuando volvió a encontrárselos en la estación de YPF, pasaron riéndose.
Viajaban a Ushuaia para invitar mujeres y hablar en el Canal, para lo cual la Gobernación prestaba el avión; como así ir a Río Gallegos a comprar las telas para las banderas, que fueron hechas por una de las señoras que colaboraban.
Para hacerse los análisis en el Hospital, para el apto para correr, estaba el Dr. Enzo Magaldi esposo de Nélida Juich.
También estaba Edith Gallardo, que era farmacéutica, por si se necesitaba algo.
Tenía que preocuparse por arreglar el circuito del autódromo, ya que era puro barro, había que hablar en Vialidad, con uno y con otro e ir haciendo los pedidos y llevar un regalo como engaño.
Nuestra bandera
La bandera que las iba a representar fue diseñada por Miryam. Era una mujer de pelo largo, con el casco puesto, pero se le veían los rulos; atrás estaban las banderas: la de largada en blanco y negro y la argentina, también se puso la bandera chilena. La cual lamentablemente se perdió con el paso del tiempo.
Se las rebuscó para lograr diseñarla en aquellos tiempos con lo que tenía a mano, así fue que la cara era de una revista de cowboy, tenía sombrero.
Iba marcando y tomando como referencia su propia cabeza para quedará proporcionada. La pintó con témpera para que no se borrara con el agua. ¡Era hermosa!
El equipo
*Comisario Deportivo: Elena Rubio de Mingorance.
*Ambulancia del Hospital Regional Río Grande:
- Dra. Margarita Sonntag de Olmos, médica.
- Hna. Carla, enfermera.
* Mecánica: María Angélica de Pechar.
*Banderilleras: Carmen Valencia y alumnas del secundario de Don Bosco.
*Cronometraje: «Titi» Martínez y equipo.
Liscio en la casilla de cronometraje (para que nadie lo viera).
*Grúa: manejada por la señora. Elba de Nervi.
*Seguridad:
– Sonia Menéndez
– Policía de Ushuaia.
– Bomberos de Río Grande, pero detrás de la valla.
A correr
Días antes fuimos con varias mujeres para dar unas vueltas y reconocer el circuito.
La carrera se llevó a cabo del 15 de abril de 1973 en el circuito del Autódromo de la ciudad de Río Grande.
No se dejó entrar a un sólo hombre en el predio, y muchos de ellos fueron al autódromo con el fin de reírse.
Se contó con la presencia del señor Gobernador pero él se tuvo que quedar fuera de la valla. Sólo se le permitió ingresar a su señora esposa.
Las audaces participantes fueron:
- Olga Visic
- Alicia de Tenorio
- Juana de Cruchet
- Mónica de Alianelli
- Susana Cabot
- Victoria Mallemaci de Nogar
- Ana María Bares
- Nélida Juich de Magaldi
- Rosa de Degratti
- Raquel Carballo
- Luz de Ojeda
- Ana de Saenz
- Miryam Álamos
- Julia Molteni
- Sonia de Díaz
- Eva de Mallemaci
- Margarita Pacheco
- Nancy de Alllievi
- María de Gianzanti
Nélida Juich, recuerda que corrió con María Villanueva en un Fiat 125, Nº301, saliendo 1era en la Categoría C.
Miryam, con una sonrisa en el rostro recuerda que fue un éxito total y cómo después que terminó la carrera vinieron todos, se acercaron para felicitarlas y le dijeron que gracias a ellas ahora saben qué es el orden, y cuánto más fácil es para no estar llamando para largar. Había varios detalles que para ese entonces no lo tomaban en cuenta.
Cuando terminó la carrera Miryam le dijo su cuñado, lo que les había dicho a los maridos para poder conseguir que les prestaran los autos a sus mujeres, y que se había salvado ya que no le pasó nada a ningún vehículo.
La entrega de premios se hizo en el Aeropuerto y se colgó la bandera de Mujeres Fueguinas; la cual fue puesta sólo en dos oportunidades.
Miryam recuerda “éramos seis pájaros locos, ya que algunos aseguraban que esto no iba a resultar y no querían ser el hazme reír del pueblo, aunque después decían que querían ser parte de la Comisión; a lo cual le decíamos que no, que ya no haríamos de nuevo esta carrera.
Sin embargo, se hizo de nuevo y fue un éxito.
Gracias por la colaboración de Miryam Álamos, Victoria Mallemaci de Nógar, Nélida Juich, Réne Díaz, Rubén Saenz.